Aunque el día quedo nublado estar en la playa de Portizuelo es un placer. Pero esta playa que es pequeña, de piedra y con un entorno natural digno de proteger, tiene sus aguas en un estado lamentable por causa de los vertidos que aporta el arroyo que en ella desagua. Está muy bien cuidar los grandes arenales, y recibir "banderas azules", pero una buena política medioambiental carece de credibilidad mientras existan situaciones como esta de la playa de Portizuelo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario